La decisión de optar por las casas de familia se fundamenta en las características propias de este recurso en el que la convivencia es "similar" a la establecida en el domicilio de una familia natural, tanto por el espacio físico, como a nivel social... Todo ello influye, positivamente, para que la vida de los Menores que residen en estas viviendas sea lo más normalizada posible.
Los niños, de edades comprendidas entre los 0 y los 18 años, se encuentran residiendo en nuestros centros debido a diferentes problemáticas existentes en el seno familiar que han supuesto la determinación de una situación de riesgo o desamparo, siendo derivados a nuestros recursos por el Servicio de Atención al Menor de la Xunta de Galicia. En estas casas de acogida se proporciona atención especializada a los niños los 365 días del año, las 24 horas.